Los jóvenes de cuarto año se enfrentan a escenarios dinámicos que imitan fielmente la realidad, acercándose mucho a lo que sucede en una unidad de Neonatología de un hospital.

Una sala que recrea casi a la perfección la sala de Neonatología de un hospital es lo que ha montado Obstetricia y Puericultura para que los estudiantes de cuarto año puedan realizar prácticas simuladas en cuidados neonatales con uso de incubadora.

Patricia Correa, Coordinadora de la carrera, señaló que la finalidad es que los alumnos se enfrenten a escenarios lo más reales posibles y aprendan desde el cuidado hasta la prevención de infecciones en el recién nacido.
“Como parte de la formación profesional en el área neonatal de la carrera, se incluyen prácticas deliberadas y de mediana fidelidad en la formación académica del estudiante conocidos como prácticos de laboratorio”. La condición de pandemia favoreció un mayor uso de esta metodología simulada, para el desarrollo de habilidades por parte de los estudiantes previo al ingreso a campo clínico. La alta fidelidad como se materializa en este escenario comprende un espacio de mayor complejidad y riqueza, que aporta un ambiente muy parecido al real, en este caso una UTI neonatal, donde el alumno se sumerge en esta atmosfera e interactúa con sus compañeros, con su profesora, con los simuladores y con la participante simulada, en este caso nuestra invitada que personifica el rol de TENS, aportándole más dinamismo y realidad al escenario”, señaló Patricia Correa.

En la práctica simulada, los estudiantes no están posicionados como Matrones, “porque no les podemos exigir eso, sobre todo sin práctica clínica, por lo tanto, ellos están en el rol de alumnos de cuarto año, donde la profesora tiene la paciencia de ir guiándoles, acercándolos aquella realidad clínica con la cual no han tenido contacto previo”, agregó la Coordinadora.

La simulación clínica lleva ya un tiempo en Chile (más de 15 años) y en la salud se está posicionando cada vez con mayor fuerza, pues reporta muchas ventajas para el alumno como: acelerar la adquisición de habilidades técnicas, ocupar el error como oportunidad de aprendizaje, mejorar el rendimiento clínico y favorecer el aprendizaje significativo entre otros. “Los chicos tienen la posibilidad de practicar, tocar, de hacer, de realizar con el fantoma diferentes técnicas como: puncionar, tomar exámenes, dar medicamentos, instalar dispositivos médicos, etc.”, explicó la académica.

Sobre el área de Neonatología, Patricia Correa señala que es un área de paciente crítico. “Tenemos prematuros que son inmuno expuestos, inmaduros a nivel medular, también en sus mecanismos de barrera (piel, mucosas), es por esto que se debe tener muy incorporado el manejo de área limpia y área sucia. Es importante que acá los jóvenes se equivoquen, integren la importancia del lavado de manos, del uso adecuado de las áreas, de la asepsia y antisepsia, así en campo clínico llevaran mucho más incorporada estas precauciones”.

Incubadora

El Convenio Unicit-Usach-Mineduc, con la finalidad de preparar a los estudiantes de Obstetricia y Puericultura de la manera más real posible, optó por adquirir una incubadora que permite a los alumnos adecuarse a prácticas simuladas y responder de este modo a los requerimientos de su avance estudiantil.

Viviana Rada, Decana de la Facultad, afirmó que “el motivo de la compra es nuestra constante preocupación por la formación de los alumnos. Pese a que la universidad está en proceso de cierre, el Convenio decidió hacer esta inversión para cumplir con las necesidades académicas de los alumnos”. Así, los estudiantes podrán tener las competencias necesarias al momento de enfrentarse a los internados de neonatología y realizar la primera unidad del programa que corresponde a simulación.

Sobre lo mismo, Patricia Correa añadió que “es de vital importancia que el estudiante que se prepara para ser Matrona (ón), conozca desde cerca el manejo y utilidad de la incubadora, ya que es un equipo indispensable en estas unidades. Así, la reciente adquisición del Departamento de Ciencias de la Salud llega a revolucionar el aprendizaje, entregando la oportunidad de desarrollar destrezas y conocimientos”.

El equipo adquirido por la universidad es la Incubadora modelo YP90 de Skill Training, es un equipo crítico en Neonatología orientado para el uso de recién nacido con patologías, ya que otorga un microambiente en el cual neonato reduce al mínimo su gasto energético en termo regular, destinándolo para su crecimiento y recuperación. “El contar con estos equipos, permite a los profesores dinamizar y fidelizar las experiencias de aprendizaje y a los estudiantes, enfrentarse a diferentes escenarios con un nivel mucho mayor de complejidad”, comentó la Coordinadora.